50 Brazas - Diario de campaña IV

Sesión 12 - Jueves 4 de Mayo de 2023

Vaari y yo, junto a Iñigo, buscamos información de otros kraken o magos, nos vamos a la taberna de El diablo loco para ver si podemos conseguir tripulación. Dormimos en casa de José María Caballeros al menos de momento. Alfrida se queda en su casa. 

Al llegar a la taberna descubrimos que la tabernera es una kehana, raza que odia a los doreen, raza de Vaari, de hecho cuenta la historia que los últimos doreen fueran un delicioso banquete para los kehana. La tabernera increpa a Vaari duramente haciendo referencia a un cartel en la puerta que prohíbe la entrada a los doreen,  a la vez que un diablo loco bloquea la puerta y nos amenaza, 2 diablos locos más se van corriendo tras unos reservados, se oyen ruidos de bajar escaleras. Viendo que no podemos tomar unas copas con calma y buscar información sin más, le lanzo un chorro a la kehana llamada Mautzi, yo paso hacia la escalera para proteger ese lado, y surte efecto, aunque no sube nadie, si salen dos corsarios de los reservados que no me prestan atención y arremeto contra ellos por la espalda.

Iñigo saca su trabuco y dispara, mientras lanzo una redoma con aceite contra los barriles de ron tras la barra, alcanza a los corsarios por la espalda y al haber velas sobre las mesas y barra estos comienzan a arder. La kehana salta iracunda sobre Vaari, que ya tenía desenvainada su espada ancha, este ve como la kehana hunde su rostro en la espada para poner fin a su vida rápidamente. Iñigo dispara de nuevo, esta vez con su pistola de dos cañones y mata a un diablo loco, desenvaina su sable y ataca al que bloquea la puerta, Me avisan de que ya podemos huir pero uno de los corsarios en llamas me dispara con su mosquete, por suerte Iñigo lo remata. Suben dos personas, uno de ellos llamado Martín del Fuego, yo mismo me acerco y de un chorro mato a uno, mientras, Martín grita pidiendo calma, para intentar comprender lo ocurrido. Increíblemente nos cita allí dos días más tarde para reparar aquel destrozo, puede que nos ofrezca trabajo, pues hemos acabado con los anteriores contratistas.